Fiesta en La Solana

Los solaneros no han faltado a su cita. El 8 de diciembre hay que estar en la parroquia para vivir con gozo y alegría la fiesta de la Madre del cielo.

Este año la lluvia quiso quitar el protagonismo a la Madre, a la Virgen Purísima, pero no pudo. Una iglesia con niños, jóvenes, adultos,... celebrando una misma fe, una misma esperanza.

La celebración fue, como todos los años, muy participativa en los cantos, moniciones, lecturas, peticiones,... Durante toda la celebración se tuvo un recuerdo especial por las personas que no estaban entre nosotros y que han celebrado otros años esta eucaristía de fiesta.

Una celebración con un gran silencio orante y participativo donde se notaba que todos querían participar por medio del canto, de las contestaciones, de la oración...

Por otra parte, los tradicionales gazpachos se han suspendido hasta nueva orden por la lluvia. Eso sí, las tortas de pan se repartieron.

En nuestra galería de imágenes puedes ver algunas instantáneas de la eucaristía de la fiesta.