BEATO RIGOBERTO, UN REGALO PARA TODOS

BEATO RIGOBERTO, UN REGALO PARA TODOS

Os dejo, con algo de retraso, una instantánea de la Eucaristía que reunió a fieles de Alcadozo, Peñas de San Pedro y Pozuelo. También se acercaron unos amigos de Murcia que son devotos de nuestro Beato. Personalmente fue un momento que nunca olvidaré: emoción y alegría son las palabras que mejor expresan lo que sentí en ese momento. Pisar la tierra que un día fue regada con la sangre de estos mártires, estar en el mismo lugar en que los ojos de su cuerpo se cerraron a este mundo, y los del alma se abrieron para la eternidad junto a Dios, es algo que llenó el alma de todos los que acudimos.

Los cantos de la Eucaristía parecían querer unirse con aquellos susurros y silencios de antaño: susurros de perdón, de confianza en Dios. Silencios de despedida de lo conocido, entregándose a lo soñado.